
Así es el nombre que tiene la sala, pero como podeis comprobar su espíritu sigue en plena juventud. Allí vienen a pasar juntos unas entretenidas tardes con sus juegos de cartas, sus tertulias y sus cafecitos.
¿Donde mejor para pasar la tarde calentitas, cómodas y, lo más importante, en buena compañía? Como veréis por las fotografías, disponen de una sala muy amplia. No penséis que quedan mesas libres habitualmente, lo que pasa es que fui demasiado pronto a hacer las fotos y todavía no habían llegado todas.
Una de las tertulianas expresó lo bien que allí se encuentran, olvidando en ese rato las preocupaciones.
Espero que todas y todos paséis un feliz verano. Volveremos a vernos, a la vuelta de vacaciones.
Disfrutadlas!
María Teresa Gimenez